Propiedades que debe cumplir un buen abono orgánico
Propiedades que debe cumplir un buen abono orgánico
Al comprar un abono orgánico, debemos exigirle a nuestro proveedor que cumpla tres criterios:
- Que sea estable (estabilización). El producto final debe tener siempre las mismas características físicas y químicas. Esto nos facilita la dosificación y nos permite predecir el resultado de las enmiendas. Esta estabilidad la garantizan los estiércoles animales y los restos clasificados de cosechas vegetales.
- Que esté libre de patógenos y semillas de malas hierbas (Higienización).
- Que sea homogéneo. Esto facilita el reparto, permite ajustar las dosis de enmienda y favorece la uniformidad en el crecimiento de nuestros cultivos.
Estos parámetros se consiguen con una cuidadosa selección del material de entrada y mediante un riguroso control del proceso completo de compostaje que incluye tres fases: mesófila (inicial), termófila (fermentación) y maduración donde se produce su humificación. Si el producto final no es estable, corremos el riesgo de quemar un césped o salinizar un huerto. Deberemos rechazar los compuestos baratos procedentes del compostaje de resiudos sólidos urbanos, lodos de depuradoras y en general grandes procesos industriales que no garanticen la calidad y la uniformidad del material de entrada. El peligro de aportar metales pesados con este tipo de materias primas es muy alto.
Parámetros que determinan la calidad final del producto:
- Temperatura. Debe estar controlada en cada pila diariamente mediante lecturas termométricas. Al principio se alcanzan valores de 75 - 80 ºC para luego ir bajando paulatinamente. El volteo periódico es una operación fundamental para evitar el exceso de sobrecalentamiento y garantizar su correcta maduración. El abono orgánico debe tener una temperatura en torno a los 38 – 40 ºC.
- Humedad. Debe ser tal que permita una aireación correcta del sustrato y permita mantener una adecuada actividad de los microorganismos edáficos encargados de su transformación. Debe estar comprendida entre un 40 y un 50 % Rechazaremos los estiércoles con exceso de agua pues son más pesados de manejar, ensucian a los operarios, dificultan el reparto y se compactan en exceso. Si el fabricante asegura una determinada humedad en su producto final podremos comprar al peso sin llevarnos a engaños. La formulación granulada requiere de un proceso industrial de peletizado que implica un proceso de secado cuyo contenido final de humedad está en torno al 15 %. Facilitando así el apilado de sacos y minimizando los procesos de fermentación que producen malos olores.
- Compactación. Si el producto está muy compactado no se airea bien y se originan procesos de fermentación anaeróbica que producen un fuerte olor a metano. Es un factor ligado directamente al contenido de humedad y al tamaño de fibra. Un material que no es cribado lleva exceso de polvo y tiende a aglutinarse.
- Conductividad eléctrica. A medida que el producto se estabiliza tiende a aumentar el contenido de sales. Un exceso de salinidad en el abono orgánico puede condicionar la dosis y los resultados finales de un cultivo. Procuraremos que el producto no exceda de 5 milisiemens/cm
- PH. Es recomendable que su valor sea próximo al neutro (PH 7) o ligeramente ácido. Valores por encima de 8 pueden provocar bloqueo en la absorción de ciertos elementos y clorosis foliar.
- Relación Carbono/ nitrógeno. Es un parámetro muy utilizado que indica la madurez del producto y el momento más oportuno para su comercialización. Debe ser próxima a 10. El producto final debe tener alto contenido en flora bacteriana, buen color y no ser excesivamente oloroso.
- Contenido de materia orgánica y nutrientes. El análisis químico de sus componentes debe reflejar la cantidad de materia orgánica total, extracto húmico, ácidos húmicos y fúlvicos, niveles de NPK y otros macronutrientes (Calcio, azufre, hierro y magnesio). Cuanto mayor sea su riqueza, más rentable será el producto pues exige dosis de enmienda menor minimizando costes de reparto y extendido. Una estimación de la dosis anual en cobertera necesaria podría ser: 1 Kg para una cepa de vid, 5 Kg para un olivo, 1 Tm/Ha para un cereal de invierno y 3 Tm/Ha para un cultivo hortícola intensivo.
PRESENTACIÓN
El abono orgánico puede venderse a granel, en sacas bigbag o en sacos de diferente peso y/o volumen. Suele presentarse de dos formas diferentes:
- Fibra o polvo. Se utiliza más en agricultura pues sale algo más económico y no existe limitación en cuanto a espacio o maquinaria.
- Granulado (peletizado). El pellet es un formato muy útil en jardinería y zonas verdes urbanas pues huele y ensucia menos. El pellet ensacado permite a los jardineros transportar y repartir el producto muy cómodamente. También es factible el reparto mediante abonadoras e hidrosembradoras.
Nuestra recomendación es utilizar insumos certificados para su uso en agricultura ecológica puesto que han superado unos estándares de calidad que los hacen apropiados para usarlos con garantía en cualquier tipo de cultivo. Además nos aseguramos de cumplir con la normativa ambiental aplicable utilizando recursos naturales reciclados de manera sostenible.