Tipos de colmenas para polinización de frutales
Abejorros Versus Abejas
Hasta hace bien poco, la polinización de los árboles frutales se encomendaba a nuestra abeja silvestre Apis melífera y otros polinizadores autóctonos que aparecían cada primavera de manera espontánea. La suerte de una correcta polinización dependía de dos factores: que hubiese abundantes abejas y que las condiciones meteorológicas fuesen propicias para su actividad polinizadora.
En la actualidad, el número de abejas ha descendido preocupantemente como consecuencia del abusivo uso de los insecticidas de síntesis. A esto, hay que sumar el hecho de que la floración de los frutales se inicia en primavera cuando las condiciones climatológicas son muy cambiantes (frio, viento, lluvia, etc) y bajo condiciones extremas, las abejas no salen a polinizar.
El uso de abejorros se ha generalizado en los cultivos hortícolas de invernadero debido a las limitaciones de acceso que tienen los polinizadores autóctonos para entrar. Se utilizan abejorros criados en biofábricas y no colmenas de abejas por dos razones de peso: son más eficientes y son menos agresivas (pican menos). Estos abejorros, también son autóctonos y pertenecen a la especie Bombus terrestres por lo que están perfectamente adaptados a vivir bajo las fluctuantes temperaturas de la península ibérica. Las colmenas de invernadero están acabadas en cartón que es un material ligero y aislante de bajo precio. El rango de condiciones climatológicas bajo el que es capaz de trabajar el abejorro hace que esta especie garantice una correcta polinización, no así la abeja mucho más delicada para salir a pecorear.
Desde hace varios años, las empresas de control biológico están sacando nuevos formatos de colmenas especialmente pensados para la polinización exterior. Normalmente van protegidas por una cubierta de plástico, pvc, policarbonato o polipropileno para hacerlas más resistentes a la humedad y a la insolación. Básicamente son todas muy parecidas y constan de un grupo de obreras que alimentan a una reina que pone huevos fértiles por un tiempo limitado (4-6 semanas) al término del cual, la colonia entra en declive y desaparece. Este tiempo de vida útil suele ser suficiente para solapar correctamente el tiempo de floración de la mayoría de los cultivos.
Formatos de colmenas para frutales
Existen dos tipos de colmenas
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DE NÚCLEO GIGANTE: son grandes colmenas que disponen de una sola reina y más de 100 obreras. Su diseño las dota de un sistema mejorado de ventilación. Son idóneas para la polinización de floraciones muy explosivas de corta duración. Deben colocarse dos o tres colmenas por Ha.
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DE NÚCLEO SENCILLO. Pueden ser a su vez
Colmenas simples. Son muy manejables y permiten optimizar la polinización en pequeñas parcelas o en aquellas de superficie discontinua o en bancales. Suelen colocarse entre 6 y 9 unidades por Ha (más unidades cuanto menos abejas silvestres haya en las inmediaciones)
Colmenas Dobles: constituidas por dos colmenas sencillas con las piquera invertidas para facilitar la orientación de los abejorros. Se utilizan para parcelas de 1500 a 3000 m2
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Colmenas Triples: son tres colmenas sencillas alineadas y recubiertas por una única caja de plástico cuya piquera central está invertida de posición para facilitar la orientación de los insectos. Se las conoce también como estaciones polinizadoras. Se utilizan para grandes superficies