Beauveria bassiana, Hongo entomopatógeno contra picudo rojo. Nueva estrategia de control biológico
La lucha contra el picudo rojo ha tomado un nuevo rumbo a raíz del descubrimiento hace ya cinco años de una serie de individuos muertos en España por un hongo entomopatógeno llamado Beauveria bassiana. Estos escarabajos afectados presentaban un aspecto muy característico pues aparece un moho blanquecino por las articulaciones y los tejidos blandos a modo de algodón que corresponde con el micelio de este agresivo hongo en crecimiento.
Beauveria bassiana no es nuevo ni exclusivo de nuestra latitud. Se trata de un hongo universal conocido desde mediados del siglo IXX cuando Agostino Bassi, entomólogo italiano, lo decubrió sobre gusanos de seda. Se ha utilizado mucho en el control de la broca del café en Sudamérica. En todos los casos, este hongo es exclusivo de los artrópodos y es completamente inocuo para el ser humano y los animales domésticos y de compañía.
Este hongo, como ocurre con la mayoría de los microorganismos patógenos, presenta multitud de cepas con mayor o menor agresividad para una determinada especie. Los investigadores tratan ahora de aislar la cepa más específica y virulenta contra el picudo rojo con el fin de acercarnos a niveles de eficacia próximos al 100 %.
CONTROL BÍO incorpora en su oferta un bioinsecticida a base de esporas de Beauveria bassiana, concretamente de la cepa GHA autorizada para control de mosca blanca y trips en algodón y hortícolas y en fase de homologación frente al Ministerio para picudo rojo. Su nombre comercial es BOTANIGARD
En este video del congreso sobre el tratamiento del picudo rojo que organizó PHYTOMA se ensaya el botanigard con resultados excelentes (a partir del minuto 57). El efecto es algo lento en relación a otras materias activas pero se muestra muy seguro (mortalidades en torno al 90 %) a medio plazo (dos semanas).
Lo interesante de este nuevo producto es que el mismo picudo, antes de morir, sirve de vehículo transmisor de la enfermedad transportando las esporas adheridas al cuerpo allí donde vaya. Precisamente, por esta razón se ha creado una nueva variante en su utilización contra esta plaga. Consiste en utilizar “Trampas infectantes” para capturar sin muerte, es decir, solo se pone la feromona de atracción y un poco de beauveria bassiana pero sin agua ni pastillas insecticidas. Después de cada revisión los individuos capturados vuelven a liberarse. Impregnados del fatídico hongo, dispondrán de algunos días para contagiar a sus congéneres y sembrar nuevas palmeras,