Las "plantas banco", ¿Son útiles en jardinería?

LAS  PLANTAS BANKER. ¿SON ÚTILES EN JARDINERÍA?

¿Qué son las plantas banco?

Las plantas banco o “Banker plants”  se vienen utilizando en agricultura como un sistema eficaz de apoyo al control biológico de pulgones en cultivos protegidos.

Este sistema consiste básicamente en introducir de manera estratégica  una serie de plantas que tienen la particularidad de padecer una plaga que resulta inofensiva para los cultivos pero que es utilizada como “comida fresca”  por nuestra fauna auxiliar ya sea autóctona o inoculada de manera deliberada por el propio agricultor. Si las plantas banco ya infectadas son introducidas de manera precoz en nuestro cultivo, podemos  realizar liberaciones preventivas de enemigos naturales  con el fin de disponer del suficiente número de efectivos que nos garanticen un control eficaz de las plagas desde el  momento en que empiecen a aparecer los primeros focos.

Los sistemas banco más utilizados son plantas de cereal (trigo, cebada, avena, etc) infectadas por pulgones olífagos que solo se alimentan de esta clase de gramíneas. Los áfidos más utilizados para este fin son Rhopalosiphon padi y Sitobiom avenae.  Las plantas adquiridas del vivero pueden dejarse en sus  macetas pinchadas a un gotero o pueden trasplantarse directamente sobre el terreno natural intercaladas entre el cultivo.

En agricultura intensiva, además de servir como sistema de mantenimiento de la poblaciones de enemigos naturales en ausencia de plaga como método de control preventivo, también se utilizan como refugio de la fauna auxiliar entre campañas sucesivas.

¿Qué utilidad tienen las plantas banco en jardinería?

 Los jardineros podemos introducir plantas banco para varios fines:

• En casos de sueltas de insectos comerciales (mariquitas, crisopas, Aphidius, Aphelinus, etc) podemos verificar si se han establecido correctamente, si se han adaptado a las condiciones climatológicas de nuestra zona y si tienen capacidad para autoperpetuarse en el ecosistema.
• Si optamos por el sistema de control biológico por conservación, las plantas banco nos sirven de referencia para detectar la llegada de entomófagos autóctonos . También es útil para detectar la presencia de híper parasitoides que puedan restar eficacia a los primeros  en los programas de control natural de plagas. En general, del estudio de las presas parasitadas, podemos ver la diversidad, la riqueza de nuestro jardín y la capacidad de respuesta frente a nuevos focos de insectos fitófagos.
• Cuando por razones técnicas justificadas, tengamos que aplicar fitosanitarios, las plantas banco sirven de referencia para estudiar los efectos secundarios sobre la fauna auxiliar.

¿Cuáles son las mejores plantas banco en jardinería?

Ya hemos hecho referencia a los cereales infectados con pulgón muy utilizados en agricultura. En jardinería son igualmente válidas pero teniendo especial cuidado con ponerlas junto a plantas de la misma familia (praderas con festuca arundinacea , rocallas con fetuca glauca, etc,).

La adelfa es otra planta interesante, de bajo mantenimiento, útil en el control biológico de plagas que actúa como banco. Está parasitada por Aphis nerii que es exclusivo de asclepiadáceas y apocináceas (Ojo con el jazmín de Madagascar  “Stephanotis sp.”).  Al ser peremne también es un estupendo refugio de invierno. Otras plantas candidatas  que se me ocurren son por  ejemplo la santolina que es parasitada por el pulgón  Coloradoa bournieri  o el madroño por Walgreniella arbuti.

En general, cada jardinero debe valorar la posibilidad de incluir en sus diseños plantas autóctonas capaces de adaptarse al clima local que gocen del “privilegio” de ser parasitadas por plagas inofensivas para el resto de las especies del jardín.  El jardinero también deberá conocer, seleccionar e inocular estos pulgones en detrimento de otros polífagos que puedan arruinar nuestro proyecto.

Como norma, se rechazarán las plantas extremadamente invasoras, las propensas a padecer enfermedades víricas, las muy sensibles a plagas polífagas y  las que tengan mantenimientos muy exigentes.

 Algunas plantas consideradas malas hierbas pueden ser beneficiosas  para el equilibrio fitosanitario del jardín (ya hablamos  en otro post de lo importante que era la mosquera (Inula viscosa) como refugio de chinches míridas (Macrolophus o Nesidiocoris) a pesar de su carácter invasor). La misma cerraja que tan rápidamente escardamos es colonizada por un pulgón exclusivo  denominado Euroleucon sonchi el cual es parasitado por la avispa Praon volucre que a su vez controla otros pulgones polífagos muy peligrosos como Aphis fabae fabae (terrible plaga de Ficus benjamina y Ficus lyrata) o Acyrtosiphon pisum  que infecta a las leguminosas arbustivas.