Introducción

La procesionaria del pino (Thaumetopoea pityocampa) es una plaga común que afecta, especialmente en primavera, a una amplia variedad de coníferas siendo más susceptibles las distintas especies de pinos y cedros. Sus larvas, conocidas como orugas procesionarias, se identifican fácilmente por los bolsones de seda que tejen en las copas y por su característico desplazamiento en fila india que realizan en su migración primaveral desde los árboles al suelo en busca de un lugar apropiado para enterrarse y pupar.

Sin embargo, estos insectos masticadores no solo causan daños a la vegetación, sino que también representan un riesgo para la salud humana y animal debido a sus vellosidades urticantes.

Control biológico: la alternativa natural para el tratamiento de la procesionaria.

El control biológico se presenta como primera opción y la alternativa natural más respetuosa con el medio ambiente para el tratamiento de la procesionaria. El control biológico reduce la necesidad de utilizar productos químicos, lo que contribuye a la preservación de la biodiversidad y la salud del entorno. Consiste en la utilización de organismos depredadores o parasitoides autóctonos que utilizan la procesionaria como huésped para alimentarse (depredadores) o completar su ciclo biológico (parasitoides).

El control biológico en el ámbito urbano choca a veces con los bajos valores de biodiversidad debido a la falta de suficientes espacios verdes y el uso tradicional de productos fitosanitarios. Al contrario que ocurre con el control biológico de plagas en los cultivos agrícolas, no tenemos aún posibilidad de conseguir a nivel comercial fauna auxiliar eficaz para realizar sueltas. Por este motivo, debemos implementar técnicas de apoyo que favorezcan la llegada y el establecimiento junto a nuestros pinos de sus enemigos naturales instalando cajas nido para páridos, cajas nido para murciélagos y hoteles de insectos para las avispas parasitoides.

En muchas ocasiones, la regulación biológica no resulta suficiente para controlar la plaga y es preciso valorar, dada la gravedad de sus efectos en personas y mascotas, la necesidad de recurrir al empleo de productos fitosanitarios. Es aquí donde la endoterapia, por sus especiales condiciones de aplicación, toma especial relevancia.

Endoterapia, sistema Fertinyect: tratamiento altamente efectivo para el control de la procesionaria.

La endoterapia consiste en la inyección de un producto fitosanitario autorizado directamente en el tronco del árbol de manera que la materia activa se distribuye a baja dosis de manera uniforme por toda la copa. El residuo se degrada dentro del propio árbol y al no haber pulverización, no existen problemas de contaminación por deriva al medio ambiente.

Entre los distintos sistemas de endoterapia destaca, por la eficacia y sencillez de uso, el sistema Fertinyect con dispositivos a baja presión. Este sistema se ha posicionado en algunos países europeos como el único tratamiento fitosanitario autorizado para el control de la procesionaria en espacios públicos. Esta técnica, que maneja dispositivos presurizados monodosis permite que el producto se distribuya por todo el sistema vascular de la planta, alcanzando a las larvas de la procesionaria y eliminándolas cuando se alimentan de sus hojas tiernas. Este método tiene la ventaja añadida que aporta al mismo tiempo nutrientes de absorción rápida que la planta agradece. Este método, pensado especialmente para ser usado por personas no profesionales, ofrece una solución eficiente y necesaria en las pequeñas zonas verdes de ámbito privado garantizando la protección de los árboles y reduciendo el riesgo de exposición a las temidas orugas de la procesionaria.

La normativa de uso de productos fitosanitarios evoluciona continuamente, siempre a favor de limitar los r iesgos mediambientales, de manera que al día de la fecha, solo está autorizado el Vertimec (abamectina 1, 8 EC) para uso profesional y el Epik (acetamiprid 20 SP) con sus dos formatos comerciales (profesional para envases superiores a 50 gramos y jardinería exterior doméstica en sobres de 10 y 50 gramos)

Nuestro producto YNJECT GO PROCESIONARIA ya está preparado para actuar. El usuario ha de calcular el número de unidades que precisa cada tronco en función de su perímetro. Se necesitarán 5 Ud/ml (uno por cada 20 cm de circunferencia).

El tratamiento ha de ser anual en los meses de otoño-invierno antes de que las orugas decidan bajar del árbol. Con este sistema de control, no es preciso colocar trampas de feromonas.

YNJECT GO procesionaria (listo para usar)