COMPOSICIÓN
Aqua, Propylene glycol, Vitis Vinifera Seed Oil, Pentylene Glycol, Calendula Officinalis Extract, Propanediol, Hyaluronic Acid, Aloe Barbadensis Leaf Juice, Sh-Oligopeptide-1, Sh- Polypeptide-10, Punica Granatum Seed Oil, Rosa Canina Fruit Oil, Argania Spinosa OIl, Tocopherol, Caprylic/Capric Triglyceride, Potassium Sorbate, Ceteareth-12, Ceteareth-20, BHA, BHT.
MODO DE EMPLEO
A partir de los 30 años comienzan a verse los primeros signos de la edad en nuestro rostro, pero nuestra piel empieza a envejecer años antes. Disminuye la elasticidad, la dermis pierde densidad y mantener una buena hidratación se convierte en misión imposible. Además, los rayos UV que tanto buscamos, una mala alimentación o la falta de descanso pueden acelerar este proceso. Acertar con una buena rutina facial según nuestro tipo de piel es esencial pero es importante combinarla con alguno de los múltiples tratamientos antiarrugas que existen en el mercado. Y es aquí donde te queremos hablar de los beneficios de utilizar Regenerative Ultra Sérum, uno de los más potentes regenedarores celulares que existen en el mercado.
Rostro: Agitar antes de usar. Después de la limpieza y tonificación, extender unas gotas de producto en frente, nariz, pómulos, barbilla, cuello y escote y aplicar desde el centro del rostro hacia los lados. En cuello y escote con movimientos ascendentes. Se aplica por la noche, y para obtener los mejores resultados, combinar con MULTIACTIVE ULTRA SERUM por la mañana.
Cuerpo: Agitar antes de usar. Aplicar un mínimo de dos veces al día la cantidad necesaria para cubrir la zona afectada o a prevenir, masajeando con movimientos circulares hasta su completa absorción. Dado el bajo contenido en grasa y la naturaleza de los activos , hacen que puedas aplicar este sérum tantas veces como lo necesites.
PRINCIPIOS ACTIVOS
FACTOR DE CRECIMIENTO EPIDÉRMICO (EGF): Péptido que produce nuestro propio organismo y que estimula el crecimiento, proliferación y diferenciación de las células de la piel. Hace que la piel se regenere, y también estimula al fibroblasto para crear más colágeno, elastina y ácido hialurónico. Debido a sus excelentes propiedades regenerativas, previenen y revierten los efectos del envejecimiento de la piel. Existen numerosos estudios clínicos que demuestran como el EGF interviene en la regeneración de la piel, además de reducir las manchas de la misma y retrasar la aparición de líneas de expresión y arrugas.
FACTOR DE CRECIMIENTO DE FIBROBLASTOS (FGF): Las proteínas de esta familia juegan un papel en la regeneración de una variedad de tejidos, al promover la proliferación y diferenciación celular. Es el “Fabricante de Colágeno”, aumentando la elasticidad y el tono de la piel.
CALÉNDULA: Potente efecto regenerador y cicatrizante. Cuenta con gran riqueza en ácido sacílico, fitoesteroles y betacarotenos, lo cual le otorga excelentes propiedades suavizantes, calmantes y emolientes que permiten aliviar y reducir irritaciones, rojeces y descamaciones que padecen con frecuencia las pieles sensibles.
ACEITE PEPITA DE UVA: Gran antioxidante, ayuda a regenerar las células de la piel. Previene el envejecimiento cutáneo. Protege la piel de las agresiones externas como el frío y el calor. Ayuda a difuminar las arrugas, previene la rotura de las fibras de la elastina y el colágeno. Tonifica los músculos faciales, por lo que es un gran reafirmante.
ACEITE DE ARGÁN: Estimula la regeneración de la piel. Promueve la renovación celular y aporta elasticidad. Ayuda de forma activa proporcionando un buen estado del manto hidrolipídico de la piel. Alivia y calma las quemaduras solares. Favorece la reducción de cicatrices y manchas oscuras.
ALOE VERA: Su uso diario hidrata y suaviza la piel actuando como un excelente regenerador celular. Debido a su alta penetración es un potente cicatrizante. Elimina las células muertas de la piel y favorece la salud de los tejidos. Protege la piel del daño generado por los radicales libres. Combate las irritaciones y la dermatitis, estimulando y fortaleciendo las fibras de colágeno y elastina.
TOCOFEROL: La vitamina E muestra unos resultados espectaculares para la piel. Difumina las cicatrices, elimina los pequeños granitos e imperfecciones y es una barrera natural para proteger la piel de los rayos solares.
ACEITE ROSA MOSQUETA: Excelente para pieles muy dañadas. Combate quemaduras, cicatrices y arrugas. Muy útil en pacientes en tratamiento de quimioterapia o radioterapia. Su uso diario mantiene la piel suave, tersa y con apariencia más saludable y fresca.
ÁCIDO HIALURÓNICO: Ayuda a la restauración y mantenimiento de la firmeza cutánea que se ha perdido por el paso de los años, ya que estimula la producción de colágeno, una proteína que contiene propiedades para regenerar tejidos. Disminuye las arrugas y surcos de expresión al generar una estructura de malla subcutánea, que ejerce un efecto tensor en las capas profundas de la piel, actuando como relleno. Al tener propiedades hidratantes, el ácido hialurónico deja la piel completamente humectada y reafirmada; por lo tanto, con un aspecto más liso y un tacto muy suave. El ácido hialurónico es ideal para mantener los niveles de firmeza, volumen, suavidad e hidratación cutánea.
VITAMINAS, COENCIMAS, AMINOÁCIDOS: Permite paliar las deficiencias del tejido cutáneo y propiciar los fenómenos de reparación celular (revitalización de pieles apagadas y prevención del envejecimiento, así como corrección de finas arrugas). Las vitaminas son estimulantes de los procesos reparadores dérmicos y antioxidantes, mientras que los aminoácidos y coenzimas favorecen la regeneración del tejido cutáneo. Las sales minerales son elementos esenciales de la matriz dérmica.
ACEITE GRANADA: Retrasa el envejecimiento celular, atenúa y previene la aparición de arrugas de expresión. Es un poderoso antioxidante que combate eficazmente los radicales libres. Recomendado para pieles sensibles, irritadas, reactivas y dañadas. Mantiene la elasticidad, la epidermis se hace más elástica, suave, resistente y tersa. Estimula la producción de queratina y la regeneración de la piel. Atenúa y previene las manchas dérmicas provocadas por el envejecimiento. Tiene efecto dermoprotector, ayudando a proteger nuestra piel de los agentes externos.
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